Vehículos eléctricos (EV):

La industria automotriz ha adoptado baterías de litio para vehículos eléctricos. Las configuraciones de 12 V y 24 V se utilizan habitualmente para alimentar todo, desde pequeños scooters eléctricos hasta coches eléctricos más grandes. Su peso ligero y su alta densidad energética mejoran significativamente el rendimiento y la autonomía del vehículo.

Sistemas de energía renovable:

Los sistemas de energía solar a menudo incorporan baterías de litio de 12 V y 24 V para almacenar la energía generada durante el día para usarla durante la noche o durante los períodos nublados. Su capacidad para almacenar y liberar energía de manera eficiente los convierte en un elemento básico en las instalaciones solares fuera de la red.

Electrónica portátil:

Las baterías de litio alimentan una amplia gama de dispositivos portátiles, incluidos teléfonos inteligentes, portátiles y drones. Su tamaño compacto y peso ligero son cruciales para garantizar que estos dispositivos sigan siendo portátiles sin sacrificar el rendimiento.

Vehículos recreativos y aplicaciones marinas:

Las baterías de litio de 12 V y 24 V son populares en vehículos recreativos, botes y equipos de campamento. Proporcionan energía confiable para electrodomésticos, iluminación y sistemas de navegación, mejorando la experiencia general de las actividades al aire libre.

Sistemas de energía de respaldo:

En entornos residenciales y comerciales, las baterías de litio sirven como soluciones de energía de respaldo. Su capacidad para almacenar energía de paneles solares o de la red permite un suministro de energía continuo durante los cortes, lo que garantiza que los sistemas esenciales permanezcan operativos.

Herramientas y equipos eléctricos:

Muchas herramientas y equipos eléctricos utilizan baterías de litio por su portabilidad y potencia. Esto es particularmente evidente en los sectores de construcción, paisajismo y mantenimiento, donde las baterías livianas y duraderas pueden mejorar significativamente la productividad.